La historia empieza en Margency, en la región de la Île-de-France, en 1553. El acontecimiento que desencadena la historia de los Pardaillan es la boda secreta de François de Montmorency, hijo del condestable Anne, con Jeanne de Piennes, la hija de un vecino despojado de sus tierras por su padre. François es obligado por su padre a partir para la guerra a la mañana siguiente. Durante su ausencia y sin saberlo, nace su hija Loïse. El día del regreso de François, su hermano Henri, enamorado de Jeanne, hace raptar al bebé por su hombre de confianza, el caballero Honoré de Pardaillan. A continuación obliga a Jeanne a hacerse repudiar por François, bajo la amenaza de ver morir a su hija. Pardaillan no puede evitar devolvérsela a su madre. Ésta le pide el nombre de su amo, pero Honoré le dice que ha sido el caballero de Pardaillan, sin añadir nada sobre su identidad. Honoré tiene miedo de la reacción de Henri y parte hacia París llevándose a su hijo Jean. Mientras tanto, Jeanne de Piennes llevándose a su hija intenta alcanzar a François en el camino de París. Más tarde es obligada por el condestable a renunciar de nuevo a François, quien se casa cinco años más tarde con la hija natural del rey Enrique II.
La historia sigue en París cuando Loïse ya tiene 16 años. Ella y su madre son obreras y tejen tapices para los burgueses. Loïse encuentra en el albergue de La Devinière a un joven caballero desconocido. Se trata de Jean de Pardaillan, hijo de Honoré. Éste se ha marchado seis meses antes dándole al hijo tres consejos: desconfiar de los hombres, desconfiar de las mujeres y desconfiar de si mismo. Consigue un caballo, Galaor, y un perro, Pipeau, así como una habitación en La Devinière, cuidado por Landry Grégoire, el propietario, y su esposa. El joven se siente atraído por su bella vecina e intenta abordar a la madre. Demasiado tímido, prueba sin embargo su valentía salvando a Henri de Montmorency, ahora conde de Damville, que es víctima de un asalto. Poco tiempo después, Jean salva a la reina de Navarra, Jeanne d’Albret, y a una de sus acompañantes, Alice de Lux, de una multitud de coaligados que las habían reconocido. Así se da a conocer a Catalina de Médicis, Henri de Guise y a la reina de Navarra. Los tres tratan de conseguir sus servicios, pero sin éxito. Sin embargo, el enviado de la reina de Navarra, Déodat, se convierte en amigo de Jean.
En La Devinière, Jean sorprende a los jefes del partido católico (entre ellos Henri de Montmorency) conspirando para derrocar al rey. La reina madre quiere hacer arrestar a Jean, para neutralizarlo, y el arresto tiene lugar al mismo tiempo que el rapto de Jeanne de Piennes y su hija por Henri de Montmorency, quien ha descubierto su presencia en París. Encerrado en la Bastilla, Jean es liberado rápidamente por su inteligencia y va a ver a Déodat. Así sabemos que Déodat es hijo de de Catalina de Médicis y de Ruggieri, el astrónomo de la reina, y que fue recogido con todo conocimiento de causa por Jeanne d’Albret. Él se ha enamorado de Alice de Lux, acompañante de la reina de Navarra y espía de Catalina. Ésta, descubierta, es despedida sin que Déodat se entere.
Jean se encuentra con los jefes del partido protestante y François de Montmorency, al cual puede contar la presencia y el rapto de su mujer e hija. Éste, loco de dolor, quiere recurrir a la justicia del rey. Pero en el Louvre, Jean es reconocido y obligado a huir de nuevo. Vuelve con François y los dos proyectan vigilar el palacio de Damville, a fin de arrebatarle a las prisioneras. Henri de Montmorency ha vuelto a contratar a Honoré de Pardaillan a fin de que le ayude en sus asuntos, los cuales se guarda mucho de desvelar completamente. Cuando las prisioneras son llevadas a casa de Alice de Lux, antigua amante de Henri a la que obliga mediante el chantaje, Jean y Honoré se enfrentan. Después de reconocerse, deciden que Honoré debe quedarse con Henri a fin de encontrar a las dos mujeres.
Alice de Lux, atormentada por los remordimientos, libera a sus prisioneras a pesar de las amenazas de Damville. Honoré es descubierto por éste y le hace prisionero en su palacio. Sin embargo, se escapa rápidamente para volver con su hijo a interrogar al personal y descubrir dónde se han llevado a Jeanne y Loïse. Cuando descubren el lugar, Jeanne y su hija han partido ya y han desaparecido de nuevo. Reaparecen para salvar la vida de los dos Pardaillan, atrapados por sus enemigos (Damville y los coaligados). François puede al fin reunirse con ellas. Jeanne, a consecuencia de los sufrimientos, cae lentamente en la locura y esta última alegría hace que su mente se trastorne definitivamente.
La historia continuará en la segunda parte de la novela, La epopeya del amor (L'Époppée d'amour).
obra excelente de aventuras de capa y espada donde le honor y la lealtad se ennoblecen por el protagonista en una época de donde la intolerancia y las intrigas juegan un papel importante en la historia de la humanidad.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, Fernando. Zevaco, junto con Dumas y Sabatini, son los representantes genuinos del género de capa y espada.
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